Sobre un sábado cualquiera

Me levanto con resaca. Hacía tiempo ya. Anoche anticipamos la despedida de Mila a Brasil y nos bebimos una botella de vozca traida de Rusia. 3 Colombianos, una brasilera y yo. Luego llegó la vecina para decirnos que no hiciésemos tanto ruido. Cuando la ví, le dije que tenía que entrar a tomar unas copas con nosotros. Acabó contándonos su vida, bailando y bebiendo caipivozcas. Fue divertido, muchísimo. He de decir que tenía 21 añitos y que era muy mona!!!
Leo un correo de Carlos que me deja de hielo. Me encanta leer cosas que yo mismo siento y que no me he parado a pensar nunca. Que alguien lo plasme por escrito.. El correo es alucinante, lleno de vida, de amor. Hacía mucho tiempo que no me impactaba nada tanto. Reconozco que me he quedado de piedra. Por otro lado, me meto en Solipotes. El post que envié ha funcionado. Tras algún tiempo con la web paradilla, ahora se está activando otra vez. Y es que el tema elegido es interesantísimo. La gente que ha escrito es de lo más sutil y los comentarios son muy maduros. Nos está sirviendo para reflexionar sobre lo que somos y lo queremos. Salirnos un poco de nuestra rutina y entrar en nuestra mente. Me encanta profundizar tanto y que los demás lo hagan. Creo que es una muestra de generosidad hacia el otro. En 3 días llega Mere. Estoy entusiasmado, de verdad. Es como tomar un trocito pequeño de la tarta de Solipotes y quebrar el deseo. Volver. Carlos: yo reconozco que tengo nostalgia. Con KIM: amor y odio. Que Argentina haya ganado 6-0 le ha subido demasiado la moral. Pero seguiremos peleándonos. Acabará con la roja y cantando "a por ellos oe". Que se levante con el himno de España es mucho pedir...