Murió Ligeti

La última pieza que analicé de Ligeti fue el poème symphonique para 100 metrónomos. Luego ví en clase sus piezas de micropolifonía y el profesor lo situó como un verdadero pionero y antecedente directo del espectralismo. Así son los genios. Llegan, rompen, anticipan, vislubran y se van. A éste le dió tiempo para ver cómo otros hacían lo que él supuso que pasaría con la música. Tomé especial simpatía por Ligeti cuando me enteré que perteneció a Fluxus. Él se reía. Seguro. Se reía de la vida pero no gratuítamente. Se reía con un espíritu científico y experimental. Ligeti se ha ido hoy, 12 de Junio. A mí me dejó aquí, perdido en un mundo musical inabarcable, lleno de apariciones del caleidoscopio sonoro y sentimental, en una atmosphère llena de aventuras, y nuevas aventuras. Ahora, como mínimo, escucharé su requiem. Qué menos.