Yo envidio, tu envidias, él envidia, nosotros ....

La envidia en los hombres muestra cuán desdichados se sienten, y su constante atención a lo que hacen o dejan de hacer los demás, muestra cuánto se aburren.


Arthur Schopenhauer (1788-1860) Filósofo alemán

Pues esta "frasecita" me sirve para comprender un poco porqué la envidia nos inunda, e incluso, como dice mi madre: "nos corroe".

Arturo lo dijo tan bien... que sólo puedo parafrasearlo.

Es normal en los grupos interactuar los unos con los otros. Charlar sobre Manolo, comentar sobre Pepe o criticar a Juanita no deja de ser una actividad propia de cualquier grupo de personas que mantengan una relación, un proyecto o un espacio en común. Aspectos que agradan y aspectos que molestan pertenecen todos al mismo saco, el de la diversidad y la variedad de personalidades, caracteres e inquietudes. Acepto y comparto el retiro individual de alguien sobre otra persona de un grupo por diferencias de caracteres o aparición de tensiones. Pero lo que no acepto es veto a nadie de forma colectiva. La reprobación y la censura abierta sólo induce al odio y delata una multitud de complejos que sólo encuentran su salida ocultándose bajo una máscara que se mimetiza con un áurea humana inundada de envidia.

Por eso me alejo de la envidia insana, aquella que nos hunde en la miseria y que nos transporta al universo de las calamidades y los fracasos.

Bravo por los demás por Ser y Estar . Sólo celebrándolo y aprendiéndo de los otros progresaremos hacia el universo de las dichas y los éxitos.